Mantenimiento Correctivo


 

Mantenimiento correctivo

Ir a la navegaciónIr a la búsqueda
Reparación de una máquina de coser.

Se denomina mantenimiento correctivo,​ aquel que corrige los defectos observados en los equipamientos o instalaciones, es la forma más básica de mantenimiento y consiste en localizar averías o defectos para corregirlos o repararlos. Históricamente es el primer concepto de mantenimiento y el único hasta la Primera Guerra Mundial, dada la simplicidad de las máquinas, equipamientos e instalaciones de la época. El mantenimiento era sinónimo de reparar aquello que estaba averiado.

Este mantenimiento se realiza luego de que ocurra un fallo o avería en el equipo que por su naturaleza no pueden planificarse en el tiempo, presenta costos por reparación y repuestos no presupuestadas, pues puede implicar el cambio de algunas piezas del equipo en caso de ser necesario, siendo muy común en caso de desgaste de las mismas en el equipo de cómputo.


El mantenimiento correctivo consiste en las actuaciones del servicio técnico en respuesta a avisos sobre el mal funcionamiento de algún equipo, activo o proceso. Comprende un grupo de tareas de índole técnica cuyo propósito es corregir los fallos que sobrevienen en el funcionamiento de la maquinaria


Mantenimiento correctivo planificado

Consiste en la detección temprana de las fallas en el rendimiento de un equipo: mediante una adecuada monitorización, se pueden detectar signos de posibles errores, y el SAT puede ser informado de forma preventiva y prepararse para atender la incidencia a corto o medio plazo.

Sea como fuere, si el rendimiento de un equipo se ve comprometido, aunque no haya dejado de funcionar completamente, la empresa se arriesga a una situación de caída de la productividad, con el agravante del tiempo. Una máquina que no funcione correctamente es como una bomba de relojería, y su inoperatividad total es solo cuestión de tiempo.

Mantenimiento correctivo no planificado

Este tipo de mantenimiento correctivo no responde a planificaciones, sino que consta de actuaciones frente a imprevistos, ocasionados por fallos prematuros de las piezas o por la ausencia de supervisión periódica del activo. Una avería inesperada o un error repentino de funcionamiento requerirán inevitablemente de atención por parte del SAT, con un irremediable periodo de inactividad a continuación.

Beneficios y desventajas del mantenimiento correctivo

Beneficio 1: ahorro a corto plazo

A pesar de su carácter de urgencia, estas intervenciones no dejan de ser actuaciones puntuales: la empresa no incurrirá en mayores costes que los estipulados por el SAT para esa operación en concreto. Además, si todo funciona bien, es posible que nunca se necesite recurrir a ello.

Beneficio 2: mínima planificación

Dado que el mantenimiento correctivo consiste en intervenir de forma aislada frente a una falla de rendimiento, la empresa no tendrá que invertir recursos en planificar el mantenimiento de estos equipos o activos, y bastará abrir un ticket de soporte para que el SAT intervenga.

Beneficio 3: sencillez

De cara a la operatividad, el mantenimiento correctivo se puede considerar una intervención simple: se trata solo de corregir el fallo de funcionamiento, bien mediante la colocación de una pieza de repuesto, bien reemplazando el equipo averiado por uno nuevo.

Beneficio 4: optimización general de los costes de producción

Como veremos más adelante, un mantenimiento preventivo suele ser más caro que simplemente contratar las operaciones de corrección. Cuando los costes de parada y reparación son inferiores a esta programación de actuaciones, a la empresa le saldrá más rentable contratar un mantenimiento correctivo.

Desventaja 1: exposición a situaciones imprevistas

Depender por completo de acciones de mantenimiento correctivo expondrá inevitablemente a los equipos a sufrir errores de funcionamiento. La ausencia de acciones preventivas puede dar lugar a fallas inesperadas de cualquier índole, y algunas podrían ser realmente caras y/o graves para el proceso productivo.

Desventaja 2: alargamiento de la inactividad operativa

El éxito de una intervención correctiva depende, en gran medida, de la disponibilidad de las piezas de recambio. Si el fallo de funcionamiento no está tipificado dentro de los más comunes, será muy poco probable que el SAT cuente con los suministros de reemplazo en un breve espacio de tiempo, lo que alargaría el periodo de inactividad del equipo o activo.

Desventaja 3: reducción de la vida útil de los equipos

El ciclo de vida de los equipos que no sean supervisados periódicamente será más corto. Es altamente probable que los fallos de funcionamiento acaben desencadenando una cascada de acontecimientos que acorten la vida útil del equipamiento.

Desventaja 4: «lo barato sale caro»

Es cierto que no tiene por qué ocurrir nada, pero ¿y si ocurre? Y lo que es peor: ¿y si ocurre con demasiada frecuencia? Puede ser que, por intentar ahorrar en costes de mantenimiento programado, se produzcan averías cuyo coste sea superior a la inversión que se podría haber realizado contratando acciones preventivas, o cuyo tiempo de puesta a punto se exceda de lo asumible.


                                                          

Comentarios

Publicar un comentario